Si el empleador te envía una carta diciendo que estás despedido, sin nombrar ninguna causa en la que te culpen de algún incumplimiento, te corresponde reclamar la indemnización por despido. Además, muchas veces, el empleador tiene irregularidades y entonces tenés que reclamar otras cosas.
Si en tu trabajo hay incumplimientos graves (estás en negro total o parcialmente, te deben sueldos, te pagan menos de la escala salarial, te registran menos horas de las trabajadas, etc.) y decidiste que no querés trabajar más ahí, podés auto considerarte despedido y reclamar la indemnización por despido.
Si estás en totalmente negro, entraste en negro y luego te pusieron en blanco, o te pagan una parte en negro, podés intimar a tu empleador a que registre los reales datos de la relación. Igual casi siempre niegan tu acusación, entonces podés auto considerarte despedido y reclamar la indemnización por despido, además de las multas por trabajo en negro.
Si el empleador te envía una carta diciendo que estás despedido por tu culpa, acusándote de haber hecho algo mal, hay que analizar el caso. Suele pasar que el despido con causa no cumple con exigencias legales, es desproporcionado o extemporáneo. Entonces, si el despido no tiene una causa válida, corresponde que te paguen la indemnización por despido.
Si mandaste el telegrama de renuncia, no te corresponde la indemnización por despido, solo te pagan días trabajados, aguinaldo y vacaciones proporcionales. Aunque, muchas veces, también corresponde que reclames sueldos adeudados, diferencias salariales, multas, etc.
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